Dejé mi casa al norte,
confín de líquenes y musgos,
haciendo esquina
entre la avenida de la hulla
y el bulevar del sol de las espigas.
Puse mi frente a barlovento
y ya de noche eché a andar hacia el mediodía.
Llegan del mar voces ungidas de colores,
y achampanadas espumas.
Huele el verano a mardi gras tardío.
Un orfeón de constelaciones vapean añiles humores.
Uniformados cual monásticos cardúmenes,
metales y maderas desfilan a los sones de "Waltzing Matilda".
Aromas a hidromiel emanan de las calles
que el aire regurgita en confeti y serpentina.
Sobre la barra del último bar
se acoda un si bemol en la penumbra
vencido de licor y de ambrosía.
Una embozada vestal de oblicuo ombligo
escancia el vino. A párpado cerrado
un piano tartamudea una lisérgica bossa nova.
Podría jurarlo, el piano de Tom Waits nunca ha bebido.
"Pájaros de niebla" (2020)
- Autor: Ringo Stax ( Offline)
- Publicado: 30 de marzo de 2020 a las 06:58
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 24
- Usuarios favoritos de este poema: Juan Q
Comentarios1
Muy bueno José Ramón.
Waltzing Matilda sí su piano a bebido.
Un abrazo amigo,
David
Muchas gracias, amigo David.
Un placer contar con tu presencia entre mis letras.
Un abrazo
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