Mi abuelo paterno,
su cabeza blanca, como la nieve
en mis recuerdos me adentro
para buscar sus tesoros.
El radio transistor
reliquia, del pasado
una afilada navaja,
compañera de faenas.
hacedor de trompos
y otros juguetes tradicionales
¡gozo de nietos, pericia de maestro!
Las ramas verdes de chacté
recolectaba con sus manos
para preparar el horno
del alimento supremo.
Junto a la abuela, probaba el sabor
de aquellos panes de ensueño,
que daban el visto bueno
a la delicada hornada.
Tejía con sus manos la cerca
que circulaba el patio
y en mis primeros años
la cuna que veló mis sueños.
©Mirna Carranza Archila
- Autor: Lissi (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 27 de julio de 2010 a las 14:43
- Comentario del autor sobre el poema: Un poco de mis ancestros, he recreado en los poemas de los abuelos la infancia preciosa que tuve en casa y el amor que me brindaron siempre.Un dulce recuerdo.
- Categoría: Familia
- Lecturas: 64
Comentarios5
Muy bien Lissi, me parece muy bien que quieras hacerle los honores a los ancestros. Muy pocos nos acordamos de ellos y fueron tan dulces y tan entregados a sus hijos y a sus nietos que merecen un poema y todo nuestro amor.
Saludos,
Precioso, es valioso en si mismo, pero además cadencioso, con ritmo y bien escrito.
saludos Ale
Querida Lissi:
Hermoso poema...para tan lindos recuerdos...se añora mucho a esa persona tan querida comolos abuelos...que algo nos dejan en la vida...su experiencia y sus historias...Un beso...Hernán.
precioso poema
Muy Bello!
Mi hija me pregunto quisiera pedirte algo que no podrias darme y yo le pregunte que era, que a lo mejor si se lo podria dar, y ella me dijo un Abuelo! Triste mi padre falleció antes de que ella naciera y su abuelo materno mucho antes.....
Saludos.
gracias por detenerte en mi rincón. Tuve la suerte de conocer a mis cuatro abuelos, me consintieron tanto. A mi abuelo maerno ya lo conocí viejecito pero tenía un porte tan elegante y era muy fuerte, él murió a los 93. Mi abuela materna vivió con nosotros hasta los 87 y fue mi modista. Mi abuelo Juilo el habilidoso haciendo juguetes artesanales se fue cerca de los 85 al igual que la abuela, quien hacía el pan más sabroso de la comunidad, ellos fueron tan amorosos. Si tu hija desea abuelos, cuéntales de tus papás y de las cosas maravillosas que solían hacer.
Gracias de nuevo,
Lissett
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