Estamos de tránsito en éste mundo,
Nuestra Alma habita en el cuerpo,
Pero no te engañes, no es del cuerpo,
Habitamos el mundo, ¡Oh ilusión!,
Pero recuerda no somos del mundo.
Nuestra alma invisible está en la prisión
del cuerpo visible,
¡Ay del apego a la carne que aborrece al alma!
Le hace la guerra porque le impide a los placeres entregarse;
No nos es lícito desertar mientras estemos prisioneros,
Ora, el dolor, la sangre y la muerte pasarán,
El futuro lo sentimos desconocido,
El sufrimiento por el temor,
Somos finitos en la tierra,
Desterremos de nuestra vida el egoísmo,
Nosotros seremos nuestro propio juez,
Descubre el propósito de la vida;
El único y verdadero,
¡El amor!
Debemos aprender
Como vivir
Y como morir,
¡Señor que se haga tu voluntad!
Claudia Alejandra Rentería Garcés
- Autor: Lii Lee (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 30 de marzo de 2020 a las 22:56
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 24
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, Lualpri, agustin monteza casusol
Comentarios1
QUE ASÍ , SEA.
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