Tan inteligentes.
Tan hermosos.
Tan rápidos
con sus crines
al viento.
Amo a los caballos.
Amigos perfectos.
Compañeros de ruta.
Hoy
en las líneas
de un periódico
apareció Metro Meteor
un caballo de carrera
ganador de algunas de ellas.
Vendido varias veces
pero ahora,
lesionado y desahuciado
La osteocondritis
lo llevaría a la muerte.
Alguien creyó en él.
Fue su nuevo dueño Ron,
un pintor.
Le enseñó a tomar el pincel
y trató su enfermedad.
Pintan juntos.
Tras las pinceladas
Metro Meteror recibe un premio.
Ron moja el pincel
y el caballo lo muerde
y hace unas pinceladas,
con varios colores,
en algunos minutos.
Ya hace obras de arte.
Sus bruscos trazos, gruesos
y vibrantes,
gustan.
Los compradores de sus lienzos,
hacen listas de espera.
El artista equino
paga su tratamiento.
Ron imprimió libros
con sus dibujos.
La gente se saca fotografías,
con Metro Meteor.
Con el dinero,
ayudan a otro caballos,
que ya no corren.
Paleornis
(Me emocionó la historia
que aquí está,
la de este caballo,
artista y benefactor)..
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