LOS RETADORES (TABULA RASA)

Julieta Iallorenzi


Los retadores

Son la tabula rasa

Sin pasado

Y su futuro depende

De lo que otros escriban

En las tablillas,

Que al intentar replicarlas

Las apolillan.

Son la tabula rasa

Todo lo que pueden saber

Es mediante lo que otros

Han visto,

Todo lo que pueden decir

Vociferado y tergiversado

Es eco de lo que otros

Han susurrado.

Todo lo que pueden hacer

Es seguir atravesando

El rumbo que otros

Han trazado.

Van tras los logros impropios

Que otros han gozado.

Todo lo que pueden ser

Es sustrato distorsionado

Y extracto de un Otro.

Porque son reta-dores

Etimologicamente

''Lo que esta atrás''

Como las sombras

Que la espalda

Luminaria persiguen.

Los retadores

Son la lapidación

De la originalidad

Y la sanguijuela

De la creatividad.

Son títeres

Que sus obras

No anfitrionan,

Hacen de corifeo

En opera impropia,

Siendo los extras

De su propia existencia.

Tabulas rasas

Caóticos conversos

Rogando pertenecer,

La orfandad del rechazo

En sus cuores áridos

Sella ardiente flechazo,

Y los torna iracundos

Destilando discordia

Sobre la literaria

Que no pueden componer,

Ni reinar en la poesía

La más sublime brujería.

Los retadores

Son entes duales

Que carecen de unidades,

Y hambrientos están

De aquellas virtudes

Que no igualan,

De autenticidades

Que no alcanzan.

Y se convierten

En detractores

Eternos erráticos opositores

De los que tengan

Todo el brillo

Que sus opacos

Huecos necesitan,

Los que carezcan

De todo lo que

A sus negros hoyos

Los rellena.

Y así aúllan y le gruñen

A la luna llena

De grandeza ajena.

Los emuladores

Tienen el síndrome

Del gemelo evanescente,

Por eso van mimetizándose

Entre la gente,

Buscando alguna

Personalidad rutilante

Para trocar de ella

Su individualidad.

Pero solo se consiguen

A si mismos cercenar.

La imagen final

De toda réplica

No puede ser más

Que un reflejo deformado

En un circense espejo.

Son como la fotocopia

De una fotocopia,

Cada vez mas borrosa

Esa silueta que imita.

Copiar no es un arte

Es otro modo

De a ti mismo asesinarte.

Vacías tabulas rasas

De los retadores

Trepadores de sombras

Que mil años luz retrasan.

Por eso en sus momentos

Finales la tablilla

Estará nula,

Pues no hay velorio

Para el el luto

De las almas

Ya enterradas,

De si mismas desterradas.

La tabula rasa

De los retadores

Nata con la mezza stella

D' invidia arrabbiata...

Todo lo que pueden hacer

Es en maldecir en silencio,

Y obedecer eternamente

A quien en sus oquedades

Con creatividades

Complemente su resencio.

Reina sobre ellos

La sacra figura calcable

El modelo estrafalario

La libreta adorable

Tanto como bastardeada

Porque no puede ser

Por las nieblas soterraneas

La aurora boreal cotejada.

Reina sobre los retadores

Tristes clones de estabulario

El manual per essere come me.

Tabulas rasas

Raspándose contra atalayas,

Todo lo que pueden hacer

Es retar y tropezar

Rivalizar contra lo que

No pueden superar,

Para amorfida

Y luctuosamente existir.

Siempre y cuando la autora

Se digne a seguir

Escribiendo

Apercibiendo

Susurrando

Respirando

Trazando e iluminando,

Un glorioso y espinoso sendero.

Que a los retadores

Perpetuos impostores

Cual arenas movedizas

Habrá de sus miserias hundir.

Porque arrastrasen

Por lo que luminico levita

Para asechar

Lo que con sumo asco

Tanto las evita,

Lo que tabulas rasas

En ellas jamas pueden tallar.

Prolifera singularidad

E inquebrantable gozo de existir.

De las estrellas que las ignoran

Todo lo que pueden hacer

Los agujeros negros

Es su antimateria devorar

Y esperar la prístina sustancia

Que no se pueden apropiar.

Tabulas rasas

Piedras de su ira erosionadas,

Penosas rocas inanimadas,

Lo extinto aun tienta existir,

Para contra la mismísima

Indiferencia chocar y competir.

Mi llama de zarzal

No pienso compartir

Con retadores,

De la innovación simuladores

Del solemne arte timadores.

En sus caducadas tabulas rasas

Como epitafios sus nombres

Se habrán de inscribir.

Todo lo que pueden hacer

Es por siempre en su fosa

Desvanecer

Si al morir los soñadores

Que los retadores ensueñan

Sus sueños foráneos serán

Lúgubres pesadillas,

Tesoros que los astillan,

Pues los creadores

Nos llevamos con nos

Las llaves que destellan

E inspiran sus superfluas

Y duplicadas tablillas.


JULIETA IALLORENZI

PATENTADO EN SADAIC Y DNDA

DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS

Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.