Yo era hermosura
por encima
de las Diosas divinas;
tez pródiga de luna
y corazón falto de espinas.
Y era fruto tierno
recién caído
de la dulce encina.
Y vaga sombra del pasado
¡Y brillante luz que ilumina!
¿Hasta cuándo podré
deshojar estas margaritas
ahora mías?
DERECHOS DE AUTOR PATRICIA PALLE
LIBRO VI
Comentarios3
Pura belleza la que hay en tus letras
Muchas gracias Andy!
Bello y sencillo. Dehojar las margaritas? Siempre.
Saludos.
Pau
Un placer como siempre, Pau
Y aún lo conservas Poeta, así como la hermosura de tus letras que nos regalas a través de tu pluma. Es la 1era vez que la leo y me encanto hacerlo. Saludos cordiales
Gracias Mily, muchas gracias por leerme y por tus amables palabras.
Un abrazo
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