Aprovechando la algarabía,
marcharon unos cuantos, a la mar,
y en vez de guardar la ropa,
fueron directos a nadar.
Les vi partir al mediodía,
dijo una voz popular,
¡tremenda tropa!,
¡vaya vidas!,
gritaban todos sin parar.
Pero pasaron los días,
y se acabaron por callar,
se acabó la algarabía,
y en luto quedó la ciudad.
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Autor:
Andela (
Offline) - Publicado: 29 de abril de 2020 a las 17:16
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 30
- Usuarios favoritos de este poema: Nuria de espinosa, Lualpri, mariapdfoxa, Vogelfrei
Offline)
Comentarios3
No obstante el final, se lee delicioso
SALES DE TU CASA Y NUNCA SABES SI VAS A VOLVER.
ES TRISTE DECIRLO PERO HAY GENTE QUE NO SE ECHA DE MENOS.
Dura vida la del pescador. Yo descendiente de familias de pescadores y recuerdo sus andanzas en el duro mar.
Precioso. Un placer leerte. Abrazos
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