Compañeros y amigos, hoy toca separarnos,
para vivir de las dolencias, de nuestros débiles enfermos,
sabiendo que con nuestra ciencia acaso la vida les salvamos,
y que de la muerte, cínicamente nos burlamos.
De la fuerza por vivir, nuestro conocimiento encaminamos,
a la única verdad, que es la de aspirar a un mundo sano,
pero !oh nefasta idea! que intente separarnos,
del bello sueño, el de vivir como hermanos.
Colegas y hermanos, no cejemos nunca en nuestro empeño,
de sanar a nuestro enfermo, aunque nos cueste un desvelo,
pero tened cuidado de no caer en el desdeño,
que será tenaz y rudo como cualquier flagelo.
Si de tu ciencia duda alguna surgiera,
recuerda que el paciente tu insobornable juez será,
por eso estudia como si hoy el último día de tu vida fuera,
para no gritar - !! porqué mi paciente ahora muerto está ¡¡.
Salud, hermanos, por la ciencia una vez más brindemos,
y con este sorbo apliquemos todo el conocimiento aprendido,
recordando que con esto, como médicos iniciamos.
y que si de esto alguna vez nos olvidamos,
será como si nunca hubiéramos vivido.
- Autor: UROGYN ( Offline)
- Publicado: 2 de mayo de 2020 a las 12:04
- Comentario del autor sobre el poema: Escrito cuando termine mi carrera de Medicina en 1991.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 52
Comentarios1
Difícil profesión.. un abrazo colega
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