De una insistencia

De una insistencia marisma la lluvia en ruiseñores de ojos con memoria en círculos, pasos muertos, cuando del piano me alejo de penumbra pero perdonando ventanas en la sombra, muebles de mi alma a andar la oscuridad que ignoro en un abrir inseguro de flores que el silencio deshace entre el paisaje dormida de épocas de huesos que comunica sus olvidos y ahuyenta espadas. Corazón de nieve la culpa (el solitario de una estatua), vendrá los muros de cuerdas en dedos de algodón, al borde de carabelas con alas de horizonte la guitarra apresa un crepúsculo asesino, en vano sirvo veletas y tiovivo… quemado por tulipanes releo cartas con caminos y esquinas lejanas, acuerdo un amor sin navíos del tiempo que supuse en mi vértigo de arenas… adiós párpados cerrados, sueñame muñequita de amianto, para atravesar calles que se bifurcan o espejos con senderos de plomo hago marionetas de azar gemelos de cráneos en pedazos.

Guidemerson C. do Prado

Créditos en la imagen: Paul Delvaux