Mi madre se fue hacia el cielo
Y yo me quede solito
Llorando sin un consuelo
Con desventura y desvelo.
Mi madre era bien bonita
Era dulce florecita
Del jardín de los ensueños.
No te he podido olvidar
Un instante madre mía
Eres la luz que me guía
Quién quita mis amarguras
Con esa inmensa ternura
Que me daban tus caricias
Eran para mi delicia
Eran flores perfumadas
Hoy que he llegado a viejo
Con pensamientos añejos
Recuerdo bien tus consejos
Y extraño tu voz tan bella
Que ahora allá en el cielo
Eres mi mejor estrella
Que brillas tan esplendente
Iluminado mi mente.
Siempre tu estas presenten
En mi vida madre mía
Eres dulce melodía
Que llega a mis oídos
Y mi pecho estremecido
Está lleno de nostalgia.
- Autor: Tarnipia (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 9 de mayo de 2020 a las 23:38
- Comentario del autor sobre el poema: Poeta Guayaquileño Tarquino Piguave Arreaga, en recuerdo de su amada madre.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 34
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