Eras para mí ese vino amargo que pasaba con la dulce acogida de tus brazos,
mi desvelo en las noches al acostarme y sentir tú latido.
Fuiste la copa en la que serví hasta la última gota de mi alma,
la que terminó en una mezcla de la calidez de tus labios con las lágrimas posteriores.
Me entregue a la inconsciencia de beberte sin medida, de terminar hasta la última gota la botella,
para al final encontrarme con la luz apagada y solo con jaqueca.
- Autor: Alejandra Hurtado ( Offline)
- Publicado: 30 de mayo de 2020 a las 00:41
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 109
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, Jorge Horacio Richino, alicia perez hernandez, sandor, Fernando?, Nuria de espinosa
Comentarios5
Un gusto leerte.
Gracias.
Gracias a ti,
Saludos.
No se que ocurrió con el protagonista de estas letras;
mas si se ha ido, es incomprensible frente a los sentimientos que se manifiestan en tu hermosa y sentida prosa!
Tristeza y dulzura conjugadas!
Un abrazo!!!
Jorge muchas gracias por tus palabras,
Un saludo para ti.
MUY ORIGINAL....
SALUDOS POETA.
Muchas gracias Alicia,
Saludos .
el dolor en el amor que conlleva la desapropiación.
muchos saludos.
Saludos Eduh.
Me a gustado la originalidad, y el final con toque de humor.
Un verdadero placer leerte. Abrazos
Agradezco mucho tus palabras,
Un gran saludo para ti Nuria.
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