Te dejo con tus nombres;
Con el que te proclama
"La gracia de los hombres",
Con el que te consagra
"La elegida de Dios".
Te dejo con la llama
Que mi pecho deflagra...
Me quedo, no te asombre,
Con tu perenne adiós.
Te dejo con el beso,
El que unió nuestras almas,
El que me tiene preso,
El que tú amor reclama
Para encontrar la paz.
Me quedo con las palmas
Del que sufre y del que ama
Y ese silencio avieso
Que incansable me das.
Te dejo las umbelas
De tu amor a distancia,
Y te dejo las velas
Del barco que el destino
No supo tripular.
Me quedo con el ansia
De allarte en mi camino
Tejiendo las estelas
De tu amor bipolar.
Te dejo y no te dejo;
En esta paradoja,
La vida es un espejo.
Me voy pero me quedo,
Te quedas si te vas.
Si el tiempo y la maroja
Cubrieran mi recuerdo,
Anota en tu añalejo
Mi verso y nada más.
- Autor: J. Mangas (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 8 de junio de 2020 a las 18:50
- Comentario del autor sobre el poema: El clímax de un amor que sabes que no va a cambiar. Y te haces la pregunta de si te quedas o te vas.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 26
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez, Alice777
Comentarios1
Te dejo con el beso,
El que unió nuestras almas,
El que me tiene preso,
El que tú amor reclama
Para encontrar la paz.
..............................................
UN ADIÓS QUE NO SE QUIERE DESPEDIR Y UNA DESPEDIDA QUE NUNCA LLEGA EN BELLOS VERSOS
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.