llegaba el ocaso, yo loco por ir a
caminar en la playa y disfrutar de la
caída del sol, pero no puedo salir
de casa , solo me conformé con
escucharlo, el mar en su bravura.
Como extraño las gaviotas que
con sus chillidos me alegran el alma.
Que pena estoy pasando, porque
hasta ella no está a mi lado, porque
me hace falta sus regaños, y por
las noches su amor que nos damos.
Que tristeza entre ella y yo, que no
podemos acarisiarnos; su merced en su
casa, yo en la mía, penando , rogandole
a papá Dios que se termine este
virus que esta matando.
- Autor: CIGARRITO (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 22 de junio de 2020 a las 07:39
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 34
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, Yamila Valenzuela
Comentarios2
Levanta ya la cabeza y avanza.
Un saludo Mauro.
José gracias por tú pasar por mis letras sencillas saludo desde mar arena y linda playa que difruto toda las mañanitas abrazo fraternal esperando que te cuide y tu familia
Este virus ha dado tan fuerte, en especial a los enamorados que ya muchos han terminado, pero no te desanimes amigo querido, es mejor estar vivo a perder el amor y la vida por ese virus.
Pues con tus palabras tan melosas no creo que tu amor morirá, muy al contrario, que engrandecerá como lo eres tu. Un poeta que escribe lindo de verdad.
Abrazos fraternales.
Evola gracias por tú pasar me encantó el comentario esque el amor creo nunca muere cuando se ama de verdad solo ahi que esperar o tener paciencia y si llega difrutar de verdad saludo desde Manta Ecuador cuidece y su familia también
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