Yo sé que tú no me quieres,
y no quieres decirme adiós,
apareces en mi vida
como el vaivén de un reloj.
He bebido de tus labios
tu insipiente devoción,
desgarrándome en tu abrazo
de partidas sin razón.
Me he cubierto con desprecio,
indiferencia, rencor,
para librar el embate
de tu indomable corazón;
tú persistes, te empeñas
haces trizas mi exterior;
me enamoras, me apresas,
sucumbo otra vez a tu esencia,
te sonríes... te alejas.
Queda solo certeza
de enfrentarnos de nuevo los dos.
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Autor:
SMM (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 12 de junio de 2020 a las 03:33
- Categoría: Amor
- Lecturas: 60
- Usuarios favoritos de este poema: Jorge Horacio Richino, Lualpri, JesusMangas.
Offline)
Comentarios4
Decía la canción....desátame o aprétame más fuerte.
El único dolor admitido en el amor es el sufrimiento compartido por estar al lado de la persona amada en sus malos momentos.
Un saludo Alice.
No conocía la canción.
Ese desasosiego de ser vulnerable y al mismo tiempo querer revestirse de una fuerza que no se tiene.
Un saludo
La decepción nos hunde en la indiferencia y el rencor
todo pasa mi buena amiga
Con cariño
JAVIER.
Todo sucede por algo en esta loca vida.
El tema es hallar el verdadero por qué y a partir de allí, evaluar que es lo más conveniente para nosotros mismos.
Gracias.
Indudablemente,
he encontrado una gran satisfacción en afrontar momentos con todo su aparente peso determinante, y al mirar atrás, con su verdadera dimensión, descubrir que queda mucho por vivir.
Un saludo.
Adelante pues !
Cuídate!
Bello como tú, y como todo lo que escribes.
Gracias por existir.
Besitos😘😘😘😘😘😘
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