La corriente de la vida es inhumana, agresiva para
unos, perspicaz para los otros...
Es un lecho de silencio cuando te encuentras
seguro, cuando vives distanciado de los
problemas del prójimo.
Es censura y sumisión cuando vas
- contracorriente -,
cuando tu cuerpo te pide y tú no le puedes dar,
cuando regresa la noche y el frío llega a tu hogar.
Es el amor prohibido en noches de soledad,
la distancia incalculable cuando no puedes llegar.
Por las riberas del mundo podríamos caminar
con nuestras manos abiertas para poder abrazar,
a pobres, a vagabundos, ancianos en soledad...
Derribando para siempre los conatos de maldad,
- de violencia -
para subir firmemente la escalera del cariño,
gritando a los cuatro vientos:
- mi amado, mi amor -...
Comentarios1
Muchas gracias otra vez amigo Lualpri por leer estos poemas míos. Un abrazo muy, muy grande. Cuídate siempre
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