Si por estas palabras que hoy escribo, sangra mi corazón. ¡Qué importa! De versos hechos cenizas se impregnó mi pecho y de lágrimas furtivas mis pupilas.
La belleza de tu sonrisa sacudió mi existencia, que de la fuente seca brotó la vida y de la hojarasca renació la brisa. Te miro, te leo, te extraño, y aun así, jamás sabrás, que para ti escribo esta ferviente plegaria.
¡Río fluyente! ¡Llama penitente!
¡Labios ajados, gota de rocío!
Con los ojos vendados deambulé senderos, cosechando abrojos y podando espinas. Más hoy, el hilo azul del destino, señala sin más, tu bendito camino.
*
Todo se deshace por la fuerza de los vientos
El tiempo arrastra
Y el miedo cede
El perfume diluye
En lo profundo del alma
Y del viejo roble
Más allá de las sombras
La lámpara se enciende
Y el fuego aviva con furia inusitada
Alcanzando las nubes con sus ávidas
Llamas
Y el bosque audible su boca sella
Y la fuerza de las olas su gemido silencia
Y
La insistencia del alma, en la puerta espera
Con los pies en la tierra y la pupila en el cielo.
* Imagen tomada del muro de Islam Gamal.
Luz Marina Méndez Carrillo/30012020/Derechos de autor, reservados.
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Autor:
VITRALES DEL ALMA (
Offline) - Publicado: 5 de julio de 2020 a las 16:58
- Categoría: Triste
- Lecturas: 23
- Usuarios favoritos de este poema: alicia perez hernandez
Offline)
Comentarios3
Lindas letras; Saludos
borealara, gracias por tu visita y tus palabras. Saludos
HERMOSA FERVIENTE ORACIÓN
Alicia, me alegra encontrarte. Saludos y gracias por tu visita.
"La insistencia del alma en la puerta espera
Con los pies en la tierra y la pupila en el cielo
Que candentes espadas en el olimpo escriban"
Bellísimo
Saludos
Tiempo ha pasado sin responder. Disculpa SOY, tantas cosas en la vida que impiden caminar al lado de un poema. Gracias por tu visita y valoración.
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