“Que más parece enemigo.”
López necesita, urgente,
otro asesor que lo oriente
en materia de amistad
con rasgos de enemistad.
Ocho de julio pasado
se dio el encuentro anhelado,
Andrés atendió la cita
y en histórica visita.
A Donald dio mano “franca”,
allá, por la Casa Blanca,
de palabra hubo diarrea,
lisonjera verborrea.
El mundo entero testigo,
Trump, le dijo: “eres mi amigo”,
Amlo muy rendido, al cabo,
quedó sumiso, admirado.
Tal halago zalamero
no me parece sincero,
“de lengua me como un taco”
dice un refrán que aquí saco.
Que las mentes se agilicen,
¿porque dos personas dicen
se acabaron los problemas,
los agravios, los dilemas?
¿Tan solo por un tratado
económico pactado
dejamos atrás ofensas,
las injurias tan intensas.
Que el gringo nos ha endilgado
en el reciente pasado?;
en ese encuentro de marras
no hubieron disculpas dadas.
Qué, ¿no tenemos memoria?,
bien registra esto la historia:
Trump odia a los mexicanos
de esto imposible olvidarnos.
Nos trata de criminales,
de plano como animales,
traficantes, violadores,
¡háganme el favor Señores!
¿Por qué López, displicente,
fallando a toda su gente,
a su pueblo “sabio” puro,
no tocó el tema del muro?
No habló del “patio trasero”,
ni del racismo grosero,
no defendió a los migrantes,
a los dreamers estudiantes.
Recuerdo, estando en campaña,
fuerte, punzante, con saña,
vociferó sin parar:
“pondré a Trump en su lugar”.
En “Oye, Trump”, propio libro,
citó su desequilibrio,
con Hitler lo comparó,
eso y más ya soslayó.
De la noche a la mañana
que se le quita la maña
de maldecir al vecino,
su voz se volvió de armiño.
Muy dócil y diligente
antier, que lo tuvo enfrente,
viendo al güero muy grandote
detuvo el verbal garrote.
Por un bat se lo cambió,
uno lindo le obsequió;
manda la vida maestra
que la amistad se demuestra.
No con regalos, ni dichos,
sino fielmente en los hechos,
materialmente sin duda
y con la actitud más pura.
Los amigos verdaderos
actúan certeros, sinceros;
que no se pierda el honor,
me parece grave error.
Que se presuma esta gira
como triunfal, por fingida,
reza un proverbio al buen ser
que: “hasta no ver, no creer”.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Ciudad de México, a 10 de julio del 2020
Reg. SEP Indautor No. (en trámite)
- Autor: Gonzalo Ramos Aranda ( Offline)
- Publicado: 11 de julio de 2020 a las 02:15
- Categoría: Sociopolítico
- Lecturas: 36
- Usuarios favoritos de este poema: LEONARDO HENRRICY
Comentarios1
Gonzalo....genial tu escrito poético.....Bueno por todos lados....literariamente y socialmente. Has tocado la llaga de la verdad....Trump ejerciendo sus artes de manipulador, embrujando a López para algún proposito maléfico. Esa sangre Ario Nazi lo impulza a todas estas acciones Hitlerianas que ejerció este último en sus inicios. Odia a los mexicanos y puertorriqueños y a toda la raza latina. Pero el pueblo hispano ya está despertando y otro gallo cantará.
Hola, Leo Henry, buenas tardes. Le agradezco la gentileza de apreciar mi crónica rimada. Trump odia a los mexicanos y va el pejelagarto de arrastrado, sin dignidad ni decoro. Regresa y dice que su visita fue un éxito, increíble . . . Bueno, pero esa es una triste realidad, ni hablar . . . y lo que sigue. Buenas tardes. Que esté bien.
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