Nunca duele un sueño si llegó hasta el fin,
el café del barrio guarda la despedida:
en la bruma de tus mesas
encontré tus manos frías
revolviendo en un pocillo lo que fui
acariciando la soledad.
Barrio suburbano con la música de un tren,
tonta calesita detenida,
flores azuladas en los bordes del andén
siempre hay mas adiós que bienvenida.
Trampa de mi ensueño fue tu joven desamor,
límite del cielo tu partida.
El olvido llega. Es mi última ilusión:
curará con sal estas heridas.
- Autor: sergio ventrice (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 14 de julio de 2020 a las 09:43
- Categoría: Amor
- Lecturas: 25
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