ENTRE AMIGAS

Somos contemporáneas de los años 60’s, cursábamos la preparatoria, juntas a todos lados, las tres tan diferentes .Ema una chica de belleza inigualable y tan segura de su hermosura, era la más conocida en toda la escuela, ser amiga de ella nos ayudaba a gozar de ciertos privilegios, siempre rodeada de amigos ,el novio en turno de la escuela y fuera de ella, alimentaban su elevada su autoestima. Frecuentemente el mejor amigo del novio terminaba siendo parte de su conquista, nunca critiqué su vida personal siempre me mantuve al margen, apreciaba su bondad y hasta me sentía protegida, nuestra amistad tenía límites, sin embargo Susan era su confidente y a la vez Susan, me contaba todo sobre ella, que ironía. Para nuestra edad, época y lugar no era común tener esa reputación. El arte de tratar a los hombres fue su especialidad, hábil para manejar las situaciones, saliendo siempre adelante en sus propósitos, su doble  lenguaje de ojos y palabra, astucia y cálculo perfecto. El cigarro y el alcohol los dominó muy bien siendo  sus mejores aliados para lograr su meta, tenía hambre de libertad, para poder comerse a puños al mundo. Pronto salimos de la escuela, y pasó el tiempo, fue hasta que un día a la entrada de un cine que llegó una pareja, los dos traían lentes oscuros, de vestimentas llamativas que creí que eran artistas, el muchacho todo un galan, que robaba las miradas de las mujeres al momento al quitarse las gafas la mujer que lo acompañaba me reconoció ,era mi amiga Ema, que bárbara una mujer espectacular, llevaba maxibotas de grandes tacones  y chamarra de piel,  la verdad pasó de ser  un botón a una flor en su máxima expresión, con ese  acento que caracteriza a los del norte. Así pasaron varios años y Susan  mantenía contacto con ella y me ponía al corriente de sus vivencias, de Ema se había convertido en una mujer de mundo, manejando dinero, autos y rodeada de importantes amistades. Había pasado tiempo desde  la última vez que la vi, hasta que apareció para invitarnos a su boda, parecía haber recorrido un largo camino de experiencias y necesitaba tomar un descanso para seguir su camino , parecía haber experimentado todo y ahora sólo quería llevar una vida común . A veces miro su perfil  en redes sociales y me pregunto dónde quedaron esos hombres apuestos y adinerados, esa belleza radiante que pronto empieza a opacarse, ella nos comenta que no pasan los años por nosotras, sin embargo creo que a su manera disfrutó de muchas  experiencias inimaginables y que por suerte libró, para tener una vida tranquila cimentada en un matrimonio con sus adorables hijos. Pronto concluirá con sus estudios profesionales. Algunos tenemos una vida ordenada que en cualquier momento puede cambiar, otros tienen prisa por llegar y en el camino se quedan. Sin embargo no importa el orden, lo importante es llegar para enfrentar el final de nuestro camino que nos toca vivir.

 Taltamira