La mañana comenzó con nosotros intentando rimar los recuerdos que no pudimos hacer canción.
Tragimos la luna que hizo latir nuestros corazones esa noche, y la pusimos a reír a una sola voz.
Vos pusiste el canto, yo el puño y la letra.
El tren se pasó y nos dejó.
Allí estamos, bajo el mismo cielo queriendo amar sin el viento. Intentando florecer bajo el sol del invierno.
Tus vías terminaron en mis ojos.
Mi sonrisa comenzó con tu tono.
Pudimos hurgar sin pudor los tesoros y recitar en versos lo que hace un tiempo nos mataba por dentro.
Aquí estamos, gestando una estación florida, donde no pudimos lograr melodía ni rima.
- Autor: Matías García Fernández ( Offline)
- Publicado: 3 de agosto de 2020 a las 09:33
- Categoría: Amor
- Lecturas: 30
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