Como un inmenso árbol de amor el Cuartel extiende sus ramas albergando el rumor de las almas que expresan sus emociones al universo, dándole su particular calor y color.
Teniente Beatriz Blanca.
Parada en medio de este paisaje de ensueño,
con el alma volando, en busca de esos sueños,
que un día se alejaron por falta de amor,
y hoy vuelven renovados, con toda la ilusión.
Ilusión de unir a todos los amigos,
en el jardín florido del Portal,
rodeada de flores, todas iguales,
porque son las flores de la UNIDAD.
Son flores silvestres, que crecen,
en todos los campos, con humildad,
ninguna se distingue, son todas iguales,
pero muy especiales, pués se llaman IGUALDAD.
Todas cantan a coro, un himno especial,
creados por amigos de este Portal,
Suenan campanitas, bailan claveles,
las rosas coquetas, se unen al compás.
Tímidas Violetas, impactantes orquídeas,
tomadas de la mano, por el jardín irán,
juntando amigos, cantando alabanzas,
gritando todas juntas, QUE VIVA LA AMISTAD.
María Hodunok.
COMENTARIO DE AUTOR:
Feliz jueves mis amigos, hoy, uniéndome al tema de la FLOR, con estos humildes versos, para el Cuartel de los Poetas Locos, formado un día lejano por nuestra linda Negrita, y que ahora vuelve con la misma fuerza de la mano de un Girasol. Les deseo el mejor de los dias y una inmensa bendición de Nuestro Señor.
- Autor: Cuartel de Poetas Locos (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de agosto de 2020 a las 10:06
- Comentario del autor sobre el poema: El Cuartel de poetas locos,recuerda con gran cariño a nuestra inolvidable Capitana de la luna Maria Hodunok,siempre apoyandonos con su bella presencia .
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 49
- Usuarios favoritos de este poema: Jorge Horacio Richino, Hugo Emilio Ocanto, LEONARDO HENRRICY, Yamila Valenzuela, Alexandra L, JoseAn100, *Artemisa*, David Arthur, Rosalways
Comentarios3
Paz en la tumba de mi hermosa Mari.
Te apapacho donde quiera que estés.
Este poema lo hice pensando en ella.
Espero que lo lea y pueda disfrutarlo al lado de nuestro señor y los ángeles del cielo.
Decirte, cómo es el mar…
En la melancolía de una blanca luna, bajo un cielo de estrellas,
me dijiste que no conocías el mar;
y mi corazón se entristeció, queriéndotelo describir
con tan poquitas palabras que, hasta me sintieron mal.
Hoy quiero con mis letras hacerte llegar ese mar que no conoces,
ese mar lejos de tu Paraná, donde disfruta de su verde selva y
el azul que cubre su cielo, que es igual que el azul del mar.
Imagínate el infinito cielo azul, con olas de espumas blancas
besando arenas rubias como rayos de sol, en playas vírgenes,
a pie de selva, o, muy cerca de ciudades, donde hay barcos
que transportan a las gentes entre sus azules aguas, llamadas
océanos, por la inmensidad de distancia que existe entre sus orillas.
Todo él, de azul reluciente sin una nube en pleno día,
brilla cuál un espejo de cristal, sobre sus aguas plateadas.
Si el cielo que imaginaste se llenara de nubes, blancas o grises,
el mar cambiaría de color, tomando el de esas nubes.
Por eso, el mar es un espejo del cielo, y sus olas, el viento que mueve el aire.
Imagínate tu río, que tan bello lo describes por el amor que le tienes,
cuándo se une a la mar, la belleza que transmite es algo muy especial,
en ojos de quién lo vive y lo puede disfrutar.
Las lluvias que caen en tú Paraná, van bajando río abajo, mira si tú río es bonito
que buscando va la mar, llevándose los recuerdos de tú vida, para bañarlos de sal.
Imagínate por un momento, toda la espesa hermosura que cubre desde las cumbres
esa selva tropical, besando la orilla, de arena y espumas blancas hechas de sal.
Se encuentran el río y la mar abrazándose en la orilla, con espumas que se besan
entre mejilla y mejilla, para sellar unos amores encontrados en la orilla.
Allí se unen los dos como felices amantes, deseosos de abrazarse con sus
locuras de amor. Y se unen entre espumas, de aguas dulces y saladas,
que rompen con la alborada en un mundo de colores.
El agua que trajo el río desde tú bella montaña, ya navega por la mar
haciéndose blanca sal con la espuma que la baña, llegando hasta el litoral.
¿Te imaginas, las estrellas del cielo cayendo al mar de madrugada?
Es la cosa más bonita que da una noche estrellada, entrando sobre las olas
de esas aguas plateadas.
Se desprenden desde el cielo enamoradas del mar, siendo los marineros,
Los que con sus redes sacan, las estrellas de la mar.
¿Tú nunca viste una estrella, sacada desde el fondo de la mar?
Yo he visto de ellas muchas, y te puedo asegurar que son tan lindas y bonitas,
como las que en el cielo están.
Imagínate embarcada, en un hermoso bajel, viendo desde la distancia llegar
tan hermoso atardecer, donde el sol se va durmiendo, dando paso a un
hermoso anochecer.
Y cuando la noche llega, llenándose el cielo de estrellas hasta el amanecer,
Una luna blanca y bella, alumbra esas estrellas, que caen al anochecer.
Eso encoge el corazón, enamorándote del mar,
Igual que el tuyo lo aprieta, viviendo en tú Paraná.
Menesteo
Hermoso poema....
Gracias Artemisa.
María era una excelente compañera y una extraordinaria poetisa.
Siempre estará en mi recuerdo.
Un afectuoso saludo.
muchas gracias por tus bellas letras.
En estos días recordaba a mi mamita querida...Fue una persona extraordinaria escribia con el corazón en la manos y expresaba hermosos sentimientos...Me adopto en este hermoso portal y nunca la olvidare...
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