Existe un lugar, donde los Dioses juegan a ser criaturas, se divierten en la madeja, se enredan y se aprietan, pero nunca se liberan.
Marzuz, hijo de la nada y lo absoluto, recostado y erguido en su propio centrismo; es el único que vaga, que ronda los polvos y las aguas, teniendo suave paciencia, recia elección, de servidores y amantes para su ensueñamiento.
- ¡Majestad! Divina presencia - La voz chillona y zalamera de Morris; remiendo de orillas y bordes, criatura sin ánima que pervertía las llanuras, corroyó la sala.
- ¿Acaso me has llamado para una oprobia encomienda?- Carcomía oídos y erizaba crines, arrastrando servilismo a los pies de la vastedad.
- ¡Mmmmmmhhhhhhhh.....! - Solo el bramido de la vórtice en la cumbre y la mansedumbre de la hoguera, plañen tesitura, como el cénit en la duda.
- ¿Capaz eres de desaguarme los tuétanos? ¿Morris? - Volumen sin tono, cuando el mosco zumba modorro.
- ¿Cruzar puedes el umbral de mi oscuro? - Suavizo la eterna figura.
- ¡Nnnnnhhhhhhh, no! Magnánimo - Rinconeó cobarde en su agujero.
- ¿Hay sabiduría en el hollín?- Requisa del portento.
- ¿No soy piedra? ¿Solo soy cera?- Afloja la cuerda, suelta la presa.
- Perdón por mi torpeza, Regia figura - Alcanzó a escupir.
- ¡Pero eres certero! Como la traición, como la flecha - Respira tres veces y afirma su diestra.
- Has marcado con hierros, degüellas con rayos, invasores y alzados, fueron arrasados - Reconoce en su pose.
- Cloacas y mazmorras, fluyen y atiborran, rescato solo mi lealtad- Apuntó, sapiente de su insignificancia, Morris el sirviente.
- ¡Craquea tu escafandra! ¡Fondo del abismo! ¡Respiro en tu tubera! - La voz troncada al yerbajal de la supremacía se difuminaba alrededor de la figurilla.
- Hoy es tu no más allá, ¡Harapo! - Molesto por la incordia y la jeta del vasallaje.
- ¡Esta es tu misión! - Recostó el hormiguero de su miel en Morris, indiciándolo.
- ¡Busca el amor! - Vociferó la Testa de flama.
- ¡Yo soy el omnipotente! - ............
- ¡Solitario! - ..........
- ¡Persecutor del amor! - ..........
- ¡Traédmelo! - .........
- ¡O tu cabeza errará! - Escaldado en la coz, con vómito de apatía y sed de inocencia; proseguía.
- Busco vida en un arenal,
que fluye y tuesta,
que llena la cesta,
que rebosa mi mar,
pero tiembla mi fuerza.
- Autor: amaroz (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 1 de septiembre de 2020 a las 03:28
- Categoría: Fantástico
- Lecturas: 16
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