Nada de lo que nos llega
cae en saco roto.
De cómo toda vivencia duerme en el adentro
y sale cuando se le proclama su presencia
a tenor de algún estímulo externo.
Todo lo que comes
bebes
duermes
sueñas
respiras
anhelas...
desde que tus sentidos
se abrieron al mundo
conviven contigo,
en silencio,
a veces en grito,
otras susurrando al oído
alguna confidencia.
Todo lo que escuchas,
u oyes y te gusta,
se guarda en tu recámara
y cuando algún son
inesperado
repentino
sale a las ondas del aire
y llegan a tu yunque,
o martillo, o estribo
pergeñan tal vibración
gustosa que te aficiona
de tal manera
que pides volumen
que llenen tus ansias.
Así son los recuerdos
que se guardan
en las habitaciones
del alma.
Si quieres añadir
algún verso, añádelo.
Te doy la licencia.
- Autor: Albertín (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 24 de septiembre de 2020 a las 14:50
- Comentario del autor sobre el poema: Todo lo que recoges en hollando tu senda queda impreso en tu alma cual cinta magnetofónica.
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 63
Comentarios1
Todo lo que sueñas
se queda como en pausa
y lo anhelas y ansías
cual rito acostumbrado
y esperas a que llegue
y se vuelve maraña
que repites y a veces
se queda como el aire
y el verano lo trae
el otoño lo arrastra
el invierno lo moja
y lo vuelve primavera
sobre todas las cosas.
Así son esos sueños
que se guardan
en los rincones
del alma.
Un placer leerle, poeta. Gracias por permitirme añadir a su hermosa obra, mi humilde verso. Un abrazo.
Me gusta más tu estrofa que las mías, más clara y más precisa. Creo, no sé si por influencia de Góngora y de otros por el estilo, tengo tendencia a obscurecer el mensaje, quizás por aquello del encanto inveterado de la sugerencia.
Gracias por tu presencia en este escrito y por haber recogido el guante.
Un abrazo Lucía
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