Fue un lunes por la mañana
Cuando ella posó frente al espejo,
Quería verse especial ese día
Tenía un esperado encuentro.
Como en algún tiempo
Escogió un bonito vestido
Algo lindo pero discreto
Zapatillas y bolso combinable.
Maquillaje ligero,
Perfume dulce y delicado aroma
Solo unos pequeños pendientes
Y un collar de perlas sintéticas
que hacía contraste con aquel vestido.
Llegó la hora, ilusionada
Y con una emoción conocida,
Llegó al punto del encuentro,
Su añejo corazón latía con fuerza,
Y no podría describir su sonrisa
Al ver la silueta de aquel hombre amado.
Él al verla la saludo con un cariñoso beso
Diciendo con su enorme sonrisa
Que también él sentía que aquél encuentro
“Era una cita”
Sonrieron juntos y se fueron,
tenían un largo día solo para ellos.
Te amo por siempre, adorado Hijo.
Todos los derechos reservados
Elizabeth A.Castillo Mtz./Liaazhny
Octubre 2020
Comentarios2
siempre me ha gustado la sorpresa,me llevaste a una cita de la cual sería un romance y era tu hijo el que merecía que te presentaras tan divina, me has dado una lección los hijo merecen lo que tú has creado para volverlo a ver.
Un beso con sorpresa
Hola mi estimado amigo, muchas gracias, celebro que la cita te haya traído a mi espacio, un abrazo.
Realmente bonito y el acompañamiento de Andrea, genial.
Gracias.
Gracias a usted Lualpri por acompañarme en éstas letras,saludos.
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