Me enamoré de un fantasma
un viernes de febrero
te juro que fue sin querer
pero en sus ojos había fuego.
Su cabello como ríos de oro negro
su mirada penetrante llena de sueños
y su risa Dios !!?como amé su sonrisa
que no dudé en volverme poetisa.
En la lejanía de este laberinto
yo buscaba uno a uno ese brillo
aparecía de la nada y movía mi mundo
y yo ya le amaba con cada segundo.
Pasaban las horas ,pasaban los días
su ausencia marcaba su vida y la mía
sin él no era yo
sin mí no era él
y como un esclava caí a sus pies.
Su edad no era fija
hablaba de siglos ,
soñaba como un niño ,
amaba como rey
y defendía con vestigios.
Recorría sus caminos
buscándolo en el medio del desden
percibía su esencia
pero no había figura de él.
Pasadizos secretos donde entraban y salían
siempre aparecía cuando más lo recurría
se iba con el silencio
dejando su amor como misterio.
Pasó mucho tiempo
siempre el mismo movimiento
sonaba el reloj marcando la hora
y se manifestaba ante su niña soñadora.
Un día de verano la niña peregrinaba por el pantano un viento frío se soltó y con un llanto sórdido habló
TE AMO ,NO ME VOY ,ME QUEDO.
Cruza el sendero y recuerda lo nuestro
TE AMO,TE AMARE Y TE CUIDARE PERO MI PENAR ES AQUI Y POR TI ME SACRIFICARÉ.
Día con día pasando el pantano
la niña espera volver a tomar su mano
y que algún día libre sea
Para vivir cómo un humano.
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