"Tu no eres una tormenta,
eres un mar en calma, pues hoy
estás con el que te dió aliento de vida,
rindiendo cuentas a nuestro Capitán.
No escucharemos tu risa ni tú vos,
pero los recuerdos mellaran nuestra mente y corazón, el mar en bramesido está en calma.
Un valiente a dormido esperando las trompetas para ser llamado a comparecer con el Rey;
El te ha mandado llamar.
¡gosozo estás! nuestra almas aquí en un dolor están,
pero contentos porque descansando estás.
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