La tormenta se retiró...

La tormenta se retiró, un resto de humo azul se propaga hacia los brillosos árboles besados por la lluvia, el zarzal se apura a remendar sus espinosas melodías sobre la cresta del arco-íris bordeado de máximos colores lilas

Todo es un desastre, un Caos que tiene un presente confuso, y un futuro completamente sinuoso y oscuro, pues la vela encendida, su luz a todo no llega, en el pecho una medalla con una cruz cristiana
miedo, peticiones, rezos y promesas.

Los vientos del sur discuten con el cierzo, no habido sangre ni penas que lamentar, solo un dolorido silencio y un final sepulcral.

La sombra de Diciembre se acerca cada día un poco más, todo se cubrirá por un encaje blanco, la Música sonará a lo lejos un adagio
color esmeralda tejiendo un manto que proteja un corazón
abandonado

De vez en cuando noto que vuelve a mi la fragilidad, inexplicablemente una polilla insignificantemente pequeña, aún tengo la posibilidad de respirar, de abrir o cerrar ventanas, soy libre todavía a pesar de mi agonía, de escribir como, cuando y donde quiera, sigo aprendiendo del lenguaje de las estrellas, y sobre todo de las mariposas sin lengua, en el susurro de la noche siempre hallo todas las respuestas.

Pese a quien pese, guste o no guste, me lean o no me lean, yo soy un Poeta, un Bardo viejo que está casado con las letras, directo, intenso, profundo y real ...y al que no le guste ¡¡¡ JODER !!!....
que se vaya hacer puñetas.

Que todos sepan, que todos se enteren, que nos espera una Navidad negra llena de soledad, recuerdos, melancolía, tristeza y muerte...
ojalá me puedas leer al año que viene sin que tú ni yo, ni nuestro amor por la Poesía de ninguna manera pese a esta amenaza inexplicablemente muera.

Mael Lorens
Reservado el derecho
de Autor 25/10/2020.