Tómate un minuto para reencontrarte, con el niño ingenuo que habita en tu ser,
Para acariciarlo, para consolarlo para darle un beso a su lozana tez,
Para ser de nuevo inocente y confiado
Y mirar al futuro con ansias de ir,
Correr por el campo feliz y mojado,
Llorar por juguetes y luego reír,
Tómate un momento para ser de nuevo jinete, guerrero, armadura y corcel.
Viaja a tu pasado para recordarte, como palpitaba en tu pecho un tambor,
Baila con el ritmo con el que saltabas cuando no importaba ninguna opinión,
Espera inocente, sereno y tranquilo,
Disfruta del dulce sabor de mamá,
Que en besos, caricias, abrazos y mimos,
Embarró en tus piernas el poder de andar,
Viaja a tu pasado para estar de nuevo, desnudo de enojos, vestido de amor.
Tómate un instante para contemplarte, infante dormido confiado y en calma,
Dispuesto a lanzarte en el mar de la vida con la fe y el sueño como únicas armas,
Vuelve a agradecer a los héroes de antaño,
Juega a la pelota con viejas mascotas,
Grita de emoción con cada fin de año,
Que dejo en tus ojos cristalinas gotas,
Tomate un instante para ser tu amigo, para ver tus ojos, para hablarte al alma.
Ardego 2019
Marzo 28
- Autor: ARDEGO76 (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 31 de octubre de 2020 a las 11:01
- Comentario del autor sobre el poema: escrito después de un taller de contacto con el niño interior.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 25
- Usuarios favoritos de este poema: Vogelfrei, jose S.W., Sofanor Bonilla Fournier
Comentarios2
genial querido amigo me encanto me traes gratos recuerdos, te mando un gran abrazo
Bonito dialogo con el yo interior, abrazos amigo.
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