Paseos que hice
que hago, que pienso
de día, de noche,
bailando en el aire,
el agua y el fuego.
Paseos que hago
dentro de mi mente,
cuando re imagino
recordando a veces
el verde del prado
del gran Machu Pichu,
la arena dorada
que encontré en Egipto,
desiertos sagrados
y templos antiguos
bañados del Nilo,
cascadas de agua
vertiendo sin tregua
dentro de la selva
de Latín América
en el Iguazú
que pasa corriendo,
los pueblos de Italia,
de Francia, de Grecia,
Venecia continua
de historia y tesoros
que solo comparo
con los de Florencia,
lugares hermosos
del Cancún de México
que muestran prehistoria
en sus monumentos
trenzados en piedra
antes de los libros,
cruceros tranquilos
sobre mares anchos
con tiempo de ocio,
hastío y sosiego
visitando playas,
ciudades y pueblos.
Va llegando el tiempo
de volar de nuevo,
sin pensar en nada
mientras me paseo
con un pasaporte,
viajando sin miedo.
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