Fuimos hasta el cielo de los días
nos tocamos las arterias del amor.
Copas de cristal fueron los besos
tintos los abrazos de pasión.
Roja la avidez de nuestras bocas
fuego, intensidad del interior;
nos matamos como pocas,
todas esas veces, vos y yo.
¡Claro que te extraño como nunca!
¡nunca te he extrañado como hoy!
Hoy recuerdo vívido esos días
donde nos matábamos de amor.
Locos de entregarnos,
de asistirnos,
trémulos encuentros de calor;
brazos que conexos dibujaban
finas serpentinas de fulgor.
Cuando retorcidos de besarnos
todo el universo enmudeció,
y aplaudieron, todas las estrellas,
nuestra conjunción de luna y sol.
Comentarios5
fuuaaa amigo que bueno esta, muy bonito amigo Iván te felicito mucho
te mando un gran abrazo
gracias amigazo
siempre atento y eficaz con tus palabras
lo agradezco de corazón
y para que nuestra amistad por aqui sea "Hermetica"
jajajaja
siempre la mejor querido amigo
por mi le mandaría todos los temas jajaja
Está muy bonito.
Cuando el amor llega al punto más alto. Es difícil de describirlo.
Es algo que ha logrado, Con su hermosa, descripción poética.
Saludos.
Espléndido Ivan. Me ha encantado
Muy bello poema,en este tambien le vi varias interpretaciones,jaja,misteriós de la mente en conjuro con el poeta,Un abrazo y enhorabuena
jajajaja
Los ojos ajenos interpretan subjetividades y vale en poesía lo que creas que es.
abrazo magico
gracias por pasar
Hermosos versos, Ivan.
Un gusto de lectura.
Un abrazo.
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