Un día en que no te reconocía
saqué mis miedos afuera
y me embarqué,
aún a riesgo de perderme,
sin conocer el rumbo,
sin saber que tuya era la barca,
convencido de que se puede
si se quiere, si lo que buscas
es la verdad.
Me dejaste naufragar,
acechando, como el padre
que enseña al niño a nadar.
Hoy, por ti, sé nadar
y sé navegar.
Hoy tengo nueva vida,
verde esperanza hallada
en mis ojos brilla.
Hoy ando y ando
y no me canso,
corro veloz y no me fatigo.
Ya no soy una peonza
que no cesa de girar
en torno a sí,
ahora giro en torno a ti.
Y he abierto las ventanas
para que entre el soplo de tu amor,
que alcance a mi alma,
la eleve,como las águilas
levante las alas.
Hoy la alegría ha establecido
morada en mí. Hoy canto
como nunca lo he hecho.
Ahora rige mi corazón,
donde tu ley has escrito
para tuyo ser.
Y tú, mi único Rey
cuyo Sagrado Corazón
marca el latido de mi corazón.
Y yo, tu amado niño,
que ahora a ti se acerca.
-
Autor:
José Gomariz Fenoll (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 17 de abril de 2025 a las 04:31
- Comentario del autor sobre el poema: Este es mi canto al Maestro de maestros, al Rey de reyes. Este es mi canto a Jesús, el Cristo.
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 44
- Usuarios favoritos de este poema: EmilianoDR, ElidethAbreu, Rosa Maria Reeder
Offline)
Comentarios2
Loas al rey de reyes poeta Jose.
Saludos y gracias.😊
El cierre del poema es una celebración de la transformación del hablante. La alegría se convierte en su "morada", y la ley de amor de Dios, escrita en su corazón, da forma a su vida y acciones. La relación con lo divino se manifiesta en un sentido profundo de pertenencia y amor, donde ser "el amado niño" resalta la simplicidad y pureza de esa conexión.
En resumen, el poema es un bello testimonio del viaje espiritual de un individuo que, tras enfrentar sus temores y entregarse al amor divino, encuentra una nueva vida llena de esperanza, dirección y alegría. Nos invita a reflexionar sobre nuestras propias travesías, el valor de abrirnos a la vulnerabilidad y la posibilidad de transformar nuestra vida a través de la fe y el amor.
Gracias por compartir tu poema,
Saludos cordiales
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