Mi Erudito Sr. Vogelfrei,
hoy cuando me desayune
yo cataléptica quede,
con el terso verso adónico,
que acompañado llegó
de tres tristes versos sáficos,
y supo a rico entremés.
Seguro que yo lo aprecio,
y gracias por la enseñanza,
dada desde lontananza,
y reciba Ud. sin tardanza,
con este mi humor tan necio,
sin demora mis saludos
con octosílabos recios
de puro amor universal
la Raquelinamor
P.D. Debo algunos acentos,
os juro, mucho lo siento.
- Autor: Raquelinamor (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 19 de noviembre de 2020 a las 16:16
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 1
- Usuarios favoritos de este poema: Raquelinamor
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