Desde ese cielo bendito,
los caminos se abrieron
y todos corriendo vinieron,
buscaban la luz del infinito.
La luna lanzó un gran grito.
Quería avisar su llegada
e iluminar a la mujer amada.
Él pálido y muy asombrado,
no se había acostumbrado
y a la luna devolvió un grito.
******
Envuelta en su azulada tela,
La damisela abstraída bailaba,
él extasiado, sólo la miraba.
Sostenía la estrella y una vela.
Él pensó, en su danza ella vuela.
Era una gacela tan hermosa,
tan agraciada como una Diosa.
Cómo no enamorarme pensó,
y sin pensar a sus pies se rindió.
*****
¡Si ves la dama con una estrella,
nunca podrás separarte de ella!
Por:Raiza N Jiménez Rnj/2020
Comentarios1
Al leerte pienso en
La orla de brillante fuego
en la forma de un angel muy bello
Un gusto conocer tus letras
Raiza
un abrazo.
Gracia a ti, por detenerte a leer y comentar.Lo agradezco mucho.Gran saludo.
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