Yo fui viendo,
totales superficies,
aberrantes concreciones,
evidentes conglomerados,
sucesiones de líquenes,
eremitas sustituidos por sus
pies frígidos. Mas, en la luz,
¿quién observa oscuridad, temor,
o tiniebla? Yo era, pues, una luz:
temerosa, espabilada, inconsecuente:
como el agua, remontaba caricias
intrascendentes. Pero lo tenebroso
me esperaba, más arriba del curso,
en su limpio torbellino sublevado.
Me recreaba en lo superfluo, en sus
olas alazanas. Mas, lo oscuro,
ya lo dije, me esperaba: montado
en su vértice de despectiva resonancia-.
©
- Autor: Ben-. ( Offline)
- Publicado: 24 de noviembre de 2020 a las 00:56
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 41
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, alicia perez hernandez, Mily H.V, Jorge Horacio Richino, Classman
Comentarios1
Por ahora todos estamos así...
entre LUZ Y SOMBRAS con este mortífero VIRUS. Que ya queremos que desaparezca pero parece que el mora en la OSCURIDAD y ataca.
saludos, Ben
Así es, querida Alicia, recibe un abrazo fuerte y mi gratitud por tus palabras!
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