En el centro de la vorágine
persiste sin qué razón
mi ánimo en esto,
te destrozo todo...
Soy un ángel con las alas rotas
que pensando desvanece su dolor,
pensando en un mundo mágico
lejos de este horroroso.
Antes de que se me coman los gusanos
las ideas todas
voy a decirte cuatro cosas
aunque te sienten mal,
se te atraganten;
y es que desentonas
en este entorno
de una forma desastrosa.
Soy un ángel con las alas rotas
que ha de reaprender a volar
mientras tú lo acosas
y lo tratas mal
y le das la droga
para a qué invocar...
Tú me dejas loco
como a cualquier persona
que pase por tu lado.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.