Sutilmente tomaste los mejores sentimientos y sin requerir del menor esfuerzo, los hiciste tuyos con eternidad impredecible.
Una mirada incomparable fue suficiencia absoluta, mujer, tus ojos le brindaron luz a mi grisáceo atardecer de invierno.
Reclamo al tiempo, quizá también a mis torpes ataduras, todo era perfecto hasta que se difuminó tu rostro, entre el viento.
Y ahora desapareces, como un recuerdo, anclado a las noches que me restan llenas de locura, sin tu voz, sin felicidad plena.
Sólo queda una ligera imagen tuya en el pensamiento, causal de un incontrolable y profundo agotamiento.
Amor difuminado, te has ido, pero tu esencia se quedó firmemente atada a cada espacio hacia donde miran mis ojos.
Mujer difuminada, creo que te amaré hasta que el último ocaso dicte el final de mi vida o quizá, después también lo haré.
Te has ido, caprichosa y volátil, como te describían, haciendo sentir afortunado al más testigo de tu mirada incalculable.
Amor difuminado, podría contar las estrellas, una a una, pero sería imposible calcular las alegrías causadas a mi alma por la tuya.
- Autor: Fernando? ( Offline)
- Publicado: 26 de enero de 2021 a las 00:48
- Categoría: Amor
- Lecturas: 33
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