Cierro los ojos,
cuento 1-2-3,
estoy quieta,
obedezco las órdenes
y tú rompes el trató
Causaste daño en mí
y yo quedé callada,
vergüenza tenía
de hablar en voz alta.
Años después,
me persigues en sueños
y sigues causando dolor
en mi cuerpo
Pureza robada,
pureza arrebatada,
lágrimas silenciadas,
me da ira mi pena.
Y dime tú malhechor,
como un vestido floreado,
talla infantil,
causo tu lujuria
y perversión.
Tengo miedo de hablar
y de enfrentar
el suceso,
de que sufrí un abuso
y yo era muy inocente para aquel juego.
- Autor: -Chica rímel 👁✍ (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 21 de febrero de 2021 a las 20:55
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 55
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, Josit, rimas
Comentarios2
Hermosos versos que relatan un acto deleznable y miserable de alguien que manchó el honor de una bella dama.
Con mucho cariño
JAVIER
Muy tristes los versos que compartes hoy y triste realidad de mucha niñas a las que se les roba la inocencia... Ojalá eso cambie algún día!
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