Oscar Perdomo Marín
POETA JUAN
(Para Juan Gelman, el gran poeta argentino universal que se nos fue)
¡Oye, Juan!
Poeta Juan:
andan por ahí rondando
las aves de la noche.
El brujo chamán precede el cortejo
bajo la plata pálida y cortante
de la luna de abril.
Duerme el leopardo con un ojo abierto.
La oscuridad acecha
y lejos, en una playa verde nace el amor furtivo.
La muerte pasa de largo sobre una escoba de hielo.
Surge la vida en la caverna recién abierta de una virgen.
Todos los días, poeta Juan, se repite la Historia,
desde el largo bostezo del hombre de cro-magnon
y el ay de la escritura.
Querido Juan: dejaste en la tierra
la carga infinita del dolor.
Los verdugos envejecieron
y nacieron otros, invisibles, al acecho.
Los cazadores de poetas se quedaron sin tu cabeza.
¿Sabes Juan? ¡Claro que lo sabes!
Después que el homo sapiens
trasladó la caverna al exterior
y la llamó casa
comenzó la gran invasión
que hasta ahora las termitas no perdonan
y en rebeldía, las cucarachas sientan sus reales
en la morada del hombre.
Yo pobre mortal
busco en los basurales de la memoria de los tiempos
al inventor de la palabra amor.
Tú fuiste como nadie, un cultor de ese sentimiento
y te costó un largo exilio.
Jugamos a los naipes con palabras.
Nunca respondimos aquello en el país de Juárez:
¿Quién besó a quién?
Que alguien me diga, Juan, si la gallina fue primero
que el huevo o si el círculo alguna vez era cuadrado.
Igual que a ti, cuando niño me dijeron que Caín mató a Abel:
ese cuento se escribe todos los días.
La selva de la civilización aguanta todo.
Antes de que Collodi inventara a Pinocho
y los hermanos Grimm destaparan la caja de los sueños,
todos los niños jugaron
y me pregunto si Hitler quemó el soldadito de madera
que se robó en una tienda
de la vienesa calle de Mariahilfer Strasse
y si, un capitoste nacido en Argentina
tomó un puñal en la Plaza de Mayo
y degolló a tus hijos.
El dolor, Juan Gelman, te convirtió en exilio
pero nunca cercenó tu voz
de gladiador por el hombre y la esperanza.
Probablemente Atila jugó al gato y al ratón
y sus maullidos de sangre asolaron el mundo.
Después de todo, solo queda la poesía.
Nadie puede escribir la historia de la intimidad.
Yo conocí a un asesino con cara de ángel
y desde entonces Césare Lombroso se me desdibujó
en el imaginario de los porqués.
Hace tiempo que me dejé de hacer preguntas.
Esperamos la muerte todos los días.
Es un lugar común
pero hay muertes que no quisiéramos conocer:
la del amigo, la del hijo, la de mamá o la compañera de vida
y, sobre todo, cuando un poeta como tú, Juan
se va hoy 14 de enero de 2014.
Hoy fue tu turno: pasajero Juan Gelman.
Tu ausencia me deja las ganas de cantar un tango roto
en una taberna mexicana.
Fue cerca del Paseo de la Reforma, hacia el sur
donde hablamos de Buenos Aires
entre chili, guacamole y tequilazos de tristeza.
Ignoro, por qué entonces
me pareció recordar a Edgard Alan Poe, moribundo
en una acera de Baltimore.
Tenía tu misma soledad: la vieja persistente
que acompañó a Lorca
y baila con todos los poetas.
¡Qué privilegio el mío!
un hombre marrón del sur
que siente como ahora, rondan las aves de la noche
y escribe la niebla de este aquelarre
donde soy Dios y Demonio
bailarín sodomita desbordado,
el hijo de la bruja en una escoba por los aires
que ya no asusta.
Escucha: el puñal cada noche ronda las puertas
y vivir es un privilegio devaluado por el miedo.
Asómate Juan: la porquería de la Historia
no tiene barrenderos.
Ya no estas con nosotros y mira lo que quedó:
Drácula y el exorcista perdieron cartel
en la viscosidad del subsótano social de la droga:
el burdel del discurso envejecido de la paz que nunca llega,
el reino del ladrón predicando la honradez
el mismo converso, reclamando lo suyo
el mismo mercader del Templo de Jerusalén
latigueado por Cristo
el mismo fariseo de túnica blanca
en la Corte de Constantino
el eterno buitre viajando en el tiempo
la institucionalidad que hoy nos narcotiza
las aves de la noche negadas a pagar el condominio
el caos: la bendita deidad
rezando por los siglos de los siglos
¡Amén!
Derechos reservados
- Autor: oscar perdomo marin ( Offline)
- Publicado: 25 de febrero de 2021 a las 15:56
- Comentario del autor sobre el poema: ES UN INTENTO DE HOMENAJE A UNA DE LAS GRANDES VOCES DE LA POESÍA EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE
- Categoría: Amistad
- Lecturas: 10
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