Rojo se enamoró de negro, un color sin igual, aveces indescriptible otras solo era el y no le importaba encajar solo le gustaba hacer todo con el tiempo y que el tiempo se vuelva infinito en su derretido color.
Rojo estaba brillando como nunca, era como si sus ojos se llenarán por primera vez de otro color, no se cansaba de ver a negro por la ventana empañada coloreada de verde y amarillo pero siempre había espacio suficiente para poder ver a negro alguien distinto, alguien sin estereotipos.
Un día en un pedazo de arte se vieron porfin, color a color, ambos atónitos por los distintos y enamorados por lo parecidos en el explendor de su color; Rojo dio la voz y cautivo a negro con un par de piropos y negro no aguantó y se tiro sobre el.
No se conocían pero se amaban, eran tan opuestos en todo sentido, rojo vivía en todo el mundo, representaba lo que es el furgor del amor y negro representaba el odio y el deseo de muerte.
Sé enamoraron y follaron, salieron y cantaron...
Casi no había peleas, ambos eran perfectos ambos se amaban incluso hasta acabarse el color en el sexo pero no importaba pues cuando de amar se trata, te sales de tus cacillas y te vuelves presa del animal más salvaje y feroz.
Nunca ames tanto a alguien hasta que no ames sus defectos, no lo pensaron mucho y menos lo calcularon, entonces llegaron los problemas...
Negro tan acostumbrado a la soledad y oscuridad se comenzó a alejar y rojo tan acostumbrado a que lo miren se comenzó a derretir por la ciudad y los demás colores lo miraban sin cesar.
Negro odiaba que rojo se dejara tocar por otros colores menos rudos que el y rojo se ponía celoso de un simple cuaderno que le gustaba colorear.
Al final ambos fueron perfectos pero no aprendieron, negro tomó un rumbo distinto al de rojo y comenzó a follar con la chica más brillante como el sol.
Rojo, bueno el simplemente se quedó mirando por la ventana, esa ventana empapada y pintada por verde y amarillo, pensando en que hubiera sido.
Entonces, negro volvió y abrazó a rojo, tomaron y follaron hasta no poder pintar más, después negro besó los colores menos rojos y le confesó que el amor que tuvo por el se esfumó cuando entendió que el amor y la soledad....
NO PUEDEN ESTAR EN LA ETERNIDAD.
_RODRIGO EGO-AGUIRRE
- Autor: rodrigo hernando ( Offline)
- Publicado: 6 de marzo de 2021 a las 03:33
- Categoría: Surrealista
- Lecturas: 17
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