-La sinergia de los estandartes-

Bajaron todos los agotados y raídos estandartes

sin motivo aparencial los valientes combatientes;

en el oculto refugio desprolijo de las pretéritas artes

intento póstumo de salvar suicidas hitos pendientes.

Quedaron así  fatigadas las mareas entre espumas

abrazadas a minas y  torpedos de la siniestralidad

y en costas cercenadas se vieron antiguas las  dunas

con el viento sur rastrillando cadáveres de impunidad.

No se ven más en setiembre las oscuras golondrinas

lazarillas de  amantes olvidados que ya no renacen

como regios  plásticos  pincelares de olas y marinas

si las margaritas en probanzas de amor se deshacen.

Heráclito de Efeso se baña en el río que no creyó inmóvil,

Zenón de Elea  constata al veloz Aquiles alcanzar la tortuga

mientras poderoso Henry Ford pinta rojo su negro automóvil

y la tímida mariposa de rosa amarilla no volverá a ser oruga.

Multiplicante es la sinergia  del  caos trepidante y molecular

sin encuadre del cosmos reparador de proféticas apocalipsis,

aprestamiento en éxtasis cuánticos del  nuevo orden estelar,

gestación advenediza, novación de  Dios ¡ metáforas ni elipsis!