Difuntos del Cacique. Episodios nacionales de Angelillo de Uixó.

casas donde se enreda como las hiedras todo lo malo. Odios tras las ventanas, la luna preñada de desgracias y los campos de amapolas.

Callejones oscuros. Ambulancias que se tratan de ocultar tras una cortina en las casas para que nadie sepa que el vivo está difunto aunque lleva años tapado tras las cortinas de la casas. Vidas momificadas como en el infierno de la divina comedia. Antropología hispánica del camino en un terruño del país, desde la barriada chabolista de Texas a la cercana San Antonio, hogar de parias. Camino que han recorrido más de 12 hispánicos en los últimos años en un éxodo huyendo de la violencia vecinal extrema, amenazas de muerte con la navaja en la mano en el portal del vecino necesitado que pide limosna con dignidad toledana, los acosos donde mea el clan patriarcal en la puerta de la familia del acosado para que se vaya y alquilarle la casa gratis, o se le empuja por las escaleras con total impunidad porque se tiene prisa en llegar la parque a trapichear. Se cambia la casa del pueblo huyendo a la caseta de la montaña como en la edad media se huía de la aldea al castillo de la montaña cuando venía el enemigo. Una vez a salvo se vuelven a reproducir las situaciones de violencia, acoso, miedos tras las puertas siempre cerradas. En ocasiones el exilio son riñas familiares lobeznas donde se prefieren que se muera el hijo o la hija a verlo vivo contrariando los deseos o pensamientos del padre o la madre que ha de sufrir escuchando y sabiendo que su hijo es maricón , comunista, o se va a juntar con alguna minoría étnica. Este ambiente tradicional, casto, duro, militar y familiar no quita que los caciques patrióticos orgullosos de su vall d ´Uixó natal, no crean firmemente que esta localidad sea un lugar moderno y educador cuya inteligencia de sus caciques brilla como un ascua ardiente en la mano de su pueblo agradecido. Vall d´Uixó, la joya de la cultura española que ha dado ilustres personas de fama nacional como varios políticos cuyo griterío y amenazas sociales les ha encumbrado al poder y al aprecio popular al exigir desde las tribunas que se vuelva a aplicar en España la pena de muerte con garrote vil, la cadena perpetúa, así como su empeño en hacer santo a un vecino de vall d´uixó que murió a manos de los rojos tras haber fusilado 20 chiquillos republicanos junto sus madres. El Papa Romano máxima autoridad municipal hasta ahora les ha dicho que no, pero los caciques y pueblo de Vall d´uixó viven con la esperanza de que un vecino de Vall ´d Uixó algún día sea Papa de Roma y lo haga santo. “Vall d´Uixó ciudad educadora europea” rezan varios murales del pueblo donde han pintado arco iris formando un puente sobre niños felices compartiendo una cometa mientras en casa los arropan con la bandera nacional. La sociedad civil local también ha dado ilustres nombres como un corredor de motos que un día ganó una carrera importante y que está metido en todo tipo de negocios habiendo una fortuna prodigiosa que se ha beneficiado todo su clan. También cuenta el municipio con una red de familias del mismo clan en todos los órganos fundamentales de poder local: partidos políticos, cooperativas, banca, administración publica, prensa. Las diferentes familias políticas económicas han comprado la cadena ser local, un diario local… haciendo del municipio una gran familia que guarda un gran secreto cerrado tras una cortina, como si el pueblo fuera el telón de una obra de teatro de Valle Inclán, eterna en su miseria, angustiosa en su sociedad, cómica y trágica.

Abramos la cortina de nuestro corazón para seguir siendo humanos en este lugar.

falleció hace unas semanas en estricto silencio, como todo lo que aquí ocurre , un vecino anciano a menos de 50 metros de mi puerta. El dolor ha sido llevado al anonimato, a la censura, aquí se ha corrido una cortina y la vida de un hombre se ha hecho vapor. Es como si nunca hubiera existido. Sin embargo recuerdo hace años, antes de que se clausura en vida con toda su familia engullidos como el resto por capas y capas de aislamiento y fatalismo social, que salía a tomar el sol al borde del camino los días buenos, donde yo pasaba con algún perro y al saludarnos solíamos hablar del campo sin prisas. Me hablaba de su Jaén natal, del hambre que pasaban en aquellas tierras en la postguerra , de los caciques de su tierra, tan duros e inhumanos como los de esta, de lo mala que es la gente, y que había que obedecer a los poderosos y no meterse en cuestiones sociales. Me lo decía dando un consejo, porque mis palabras sobre políticos y mis ideas de regeneración del vall d´ Uixó donde le explicaba mi plan de modernización.

-Vea Don A…. simplemente quitando del pueblo caciques y familiares del ayuntamiento, de bancos, partidos políticos, cooperativas agrícolas, fundaciones, museos, asociaciones de vecinos, cofradías, peñas taurinas, equipos de fútbol, el pueblo se empezaría a regenerar. Luego educando en participación sociales a las clases obreras, llevando teatro a las calles, creando ateneos libertarios, colectivizando tierras, el transporte público, trayendo el tren … y mil ideas más.

Cuando terminaba mi exposición, el señor A… negando con la cabeza me replicaba:

Ángel solo tendrás problemas con las familias municipales. Piensa en ganar un jornal al día, en comer algo bueno. Una buena chuleta. Un buen trozo de jamón.

Esos eran sus consejos.

Me contaba como siendo chiquillo, no recuerdo la edad que me dijo, pero era realmente un niño, no sé si once o trece años, y ya andaba A… trabajando en el campo para una gran familia de Jaén. El caso es que estaba plantando remolacha en una gran finca, y varios jornaleros hicieron huelga hartos del hambre. Apareció la guardia civil y se los llevaron, fueron torturados y devueltos al campo con los huesos quebrados para que nunca más se volvieran a levantar. La gente siguió plantando remolacha como si nada hubiera pasado.

Y es que aquí nunca pasa nada. La vida de sus familiares ha seguido imperturbable en el día a día cara a los demás, como si el difunto nunca hubiera existido para el resto de la comunidad. Casi diario me cruzo brevemente con ellos cuando salen de casa para subir al coche. Nuestros ojos se cruzan unos segundos, nuestros labios no dicen nada como si no existiéramos los unos para los otros. Ningún gesto daba a entender la tragedia , que es comunitaria y traumatica para todos, de lo contrario nos convertimos en peores que en bestias o caciques, ya que hay pruebas de animales que sienten y sufren ante la muerte de otro animal.

Ayer casualmente con otros vecinos con los que hablo en contadas ocasiones, y siempre con cuidado de que no acabe en una pelea mortal, mientras admiraban mis jardineras colgantes empezamos hablar. Estuvimos unos 10 minutos hablando. Y finalmente me preguntaron si sabía lo del señor A…

¿ sabes quién ha muerto ? el señor A…. El otro día vino una ambulancia. ¿ no la viste?

Me quede asombrado. Se habían enterado porque son amigos de uno de la funeraria que se lo había dicho cuando acudían a otro entierro.

Ángel Blasco.