Atezado Destino XII Destino oscuro, Amor Malogrado

Con este se finaliza un capitulo, fin de una historia, para seguir andando y escribiendo.

XII
Destino oscuro, amor malogrado.

Pasaron dos días de aquel lunes
aquella mañana del miércoles
como siempre María Luisa al final del pasillo
sumergida en el aroma de aquel café
con su turbante que enmarcaba su rostro
que lucía hinchado como reflejo
de dormir y llorar con amor.
Julia, se hizo presente y le invito a sentarse
-Hoy partes a Maturín, la familia te espera
La ciudad no es lugar para una hermosa dama
menos tan inocente como tu
aquí siempre hay patiquines y aprovechadores
que están a la casa de fortunas,
o simplemente acabando con el pudor de mujeres
y tu representas belleza, elegancia y distinción aun siendo mulata.
Con la confianza que tengo en tu criterio
regresa a las tierras de oriente, reármate
y comencemos para ti una nueva vida
la vida que mereces. Para eso Carmelo y yo hemos forjado
el fierro de los valores que componen la familia, nuestra familia.
No pienses, todo pasa, el tiempo locura-
De tanto llanto y dolor, María Luisa no tuvo energía para replicar
asintió con la cabeza, ya las maletas estaban en pasillo
solo faltaba la hora que ni siquiera sabía.
Luis Manuel estaba sumergido entre tristezas y pesadumbre
admitiendo que al salir de las reglas que manejaba
surgió el amor mas bello, pero también el dolor que hoy
le hacia estar débil y sin armas para seguir
“la sociedad y sus paradigmas”
Esa mañana entre las chismosas del pueblo
al igual que la ida a la gallera
se corrió la voz de la partida de Maria Luisa
esto llego a Luis Manuel el cual no dudo un segundo
y arreglar sus andrajos y partir a la cuadra donde partían las carretas
y ahí, ahí estaba ella, con la saya blanca blusa azul
y su turbante perfectamente combinado
pero su belleza estaba entristecida
en aquel carruaje gris, el rostro de un caballero
otro viajero
hombre de la modernidad de aquellas tierras
con una sonrisa subió al carruaje
y con pesadumbre y tristeza quedo Luis Manuel
escribiendo versos, reconociendo canciones en recuerdo
y cuidando siempre el canto del Gallo, de Juanchito
símbolo de prosperidad, pero de amor para ellos.

Día de muerte del amor, de aquellos días, de días pasados
de los amores de amores, prohibidos, grandes amores.

La política, la sociedad, los paradigmas son las barreras
que castran la felicidad y amores reales
no es cobardía
es el miedo al juicio, al que dirán.
La sociedad seguirá prohibiendo, hasta cuando diga prohibido prohibir.
Prejuicios, apariencias y engaños criadores de amores compuesto por macilentos y fatuos.
Hoy digo “Que Fallo”.

La despedida de un sentimiento hermoso de un amor malogrado.

Jesús Pérez Rubí/ Andariego
01/03/2021