Ya no soy en mi
la tersa piel de ayer,
el reloj puso las arrugas
llevándose elásticas tersuras,
ojos sin parpadeos a la hora del recreo,
que , viejo, atento miro solo lo invisible.
Vigorosa la mente aún no se fatiga
goza en alerta nostalgias y recuerdos
de esos tiempos que altivos partieron
hacia alquimias propiedad de renovados brujos.
Ágil la memoria se acicala, viajera tenaz,
penitente y peregrina de hedónicas acuarelas.
La introspección triste nos advierte:
amigos y compañeros, como antes sí,
no aparecen en las cenas notivagas
ausencias que tanto duelen y apenan,
cercano tremolar de bandera blanquinegra.
Niñez indiferente a definir futuros largos,
presente inmediato, lúdico y audaz explorador
de las propuestas en la misteriosa vida inicial
trocada en profundos hitos de intercambios,
ciclotímicos entre adolescentes triunfos y derrotas.
Madurez luego de anclajes desde fines e ideales
mientras Biologìa y Ética recogen los sembradíos
amada descendencia de amores y clamores.
Intentos de vencer a Cronos en pura eternidad,
canto premial al apellido y al linaje marginal
cuestión de laudar un vero ocaso asumido
recepción entre Caronte y su Cancerbero
….ó el muy deseado abrazo del Jesús nazareno!
- Autor: Charo. (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de marzo de 2021 a las 22:15
- Comentario del autor sobre el poema: Aprestamiento para un balance de vida cuando se aproxima , tras el natalicio, la segunda gran experiencia, definitiva, desde lo terrenal e inmanente de la existencia ...en apertura hacia la eventual dimensión de la trascendencia kantiana.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 27
- Usuarios favoritos de este poema: Classman
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