Trazos amargos de una soledad
que en tu anciana cara parecen lágrimas,
son fruto del correr adolescente
de una indecente ánima.
Pues gozaste de tan buenos momentos
cuando siendo una espléndida chavala
desaprovechaste tu virtuosismo
entre chicos y camas.
Tu bebías, bailabas, divertías,
y tu padre decíate con calma:
"madura, que los trenes nunca esperan"
mas tomábaslo a guasa.
Ahora yaces perdida, sollozando,
escondida en la noche como rata,
y nada habrá, ni nadie, que a la postre
logre salvar tu alma.
Iraultza Askerria
http://iraultzaaskerria.wordpress.com/
- Autor: Iraultza Askerria ( Offline)
- Publicado: 22 de agosto de 2010 a las 07:15
- Categoría: Triste
- Lecturas: 44
Comentarios5
Mucha razon hay en tu poema, mi amigo... A veces asi pasa... hasta los angeles dicen adios!
Un abrazo,
Rocio
sentidas y profundas las lineas de tu poema..
me encanto..
saluditos..
kalita
Cuando se tiene el todo, muchas veces te quedas en la nada. Me recuerda tu poema al tema de Joaquín Sabina titulado "Princesa" y te he de confesar que siempre me gustó la canción... de donde se deduce que tu poema me ha parecido magnífico.
Un abrazo.
Bueno esto es verdad: todo empieza y todo acaba aunque a vecces
en forma drastica y si no dejaste huella buena, peor tantito.
Un abrazo cordial
Gracias por vuestros comentarios.
Un abrazo muy sentido.
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