La vi tan frágil, desarmada,
un desconcierto y asombro
se dejaba ver en su mirada,.
Su intención era combatir
salir de aquel pantano.
Tome sus manos tibias,
suaves, delicadas.
Se aferró a mi,
sin saber que soy la nada.
Vi en sus ojos el temor y
a la vez confianza.
Saqué las fuerzas
desde el horror en llamas.
La vestí de azul y
le puse alas,
besé sus ojos y
solté su alma,
Miré su foto hasta esfumarla,
caminé el camino de
su huella en llamas y
sentí en mi cuerpo
como su voz vibraba.
Todo iba a pasar,
lógica de la vida sabida.
Siempre llega el final,
siempre todo termina.
¿Dónde está su piel de seda?
¿dónde está su mirada serena?
Nada podía yo hacer y
sin embargo cada acto revise
para cambiar un poco algo...
Nada podía hacer y
a cada rato la extraño.
Amalia Beatriz Arzac
Buenos Aires Argentina
ABA 2021 copyright
- Autor: Amalia Beatriz Arzac ( Offline)
- Publicado: 7 de mayo de 2021 a las 08:23
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 153
- Usuarios favoritos de este poema: Lualpri, .........................., Augusto Fleid
Comentarios3
Poeta...
Siempre que sea necesario, busca en tu corazón, allí la encontrarás!
Gracias, muy emotivas tus palabras.
Gracias Poeta, por tu tiempo de lectura, gracias por comentar mis letras
Gracias a ti.
Cuídate mucho.
Hermosos versos!!!
"¿Dónde está tu piel de seda?
¿dónde está tu mirada serena?
Nada podía yo hacer y
sin embargo cada acto revise
para cambiar un poco algo...
Nada podía hacer hacer y
a cada rato te extraño."
Gracias Lucía Saludos poéticos
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