Hoy cuando sucedió, todo desapareció:
el cielo, las nubes y la arbolada.
Fue como golpe de Gigante, de rayo,
yo diría del destino.
Como no reconocer su silueta,
su flor de piel blanca nevada,
su fina mirada, profunda...
¡Esa mirada que me mata!
Como brillaron sus lindos
ojos de piedras escarlatas,
su dulce boca que semeja
una copa de rubí,
pero, acaso, contiene fuego,
aqueste fuego en tí.
Después de ver mi pasado
en menos de un segundo,
lancé una triste sonrrisa,
de esas momentaneas, absurdas!
tan estúpidas como fue mi vida
sin ella en épocas pasadas.
Hoy puedo afirmar que morí.
Un fantasma, nada más pasar...
Pero este tu espectro,
tu sombra oscura
¡Jamás en paz me dejará!
- Autor: Gustav Steiner (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 24 de agosto de 2010 a las 20:36
- Comentario del autor sobre el poema: A Camila
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 141
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.