Yo soñé que volvía a mi pasado
y tu amor ser primero en lograr
y soñé que atrasaba los años,
para así tu tesoro alcanzar.
Recogí almanaques pasados
y sus hojas logré despegar,
con las ansias de estar a tu lado,
mi camino volví a desandar.
Tu eras niña.-Yo algo más gastado,
tu una fruta pronto a madurar.
Tu eras negra, capullo cerrado,
yo una flor que se empieza a mustiar.
Yo era ajeno.-Tu anclada en familia.
Todavía no empezabas a amar.
Yo era un diestro de toros de lidia,
mi coleta lograste cortar.
Vi tu cara en una mañana,
me miraste con ojos de miel,
me entregastes tu estampa africana,
y yo fuí tu futuro esa vez.
Me acerqué y te dije:Eres mia.
Tu dijistes: Es cierto, lo soy.
Y allí mismo sentí que querias.
Tu supistes que amor era yo.
Lamí toda tu piel de canela,
degusté tus suspiros de mar,
transfundí mi pasión a tus venas
y después, no eras ya virginal.
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Autor:
Luis E. Calderon Romero (
Offline) - Publicado: 17 de mayo de 2021 a las 15:39
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 56
- Usuarios favoritos de este poema: Jorge Horacio Richino, alicia perez hernandez, zeraus
Offline)
Comentarios2
Hermoso poema y hermoso amor!
Mis felicitaciones, poeta!
Recibe un cordial abrazo!!!
Gracias, querido amigo.
Hermosamente hermosos versos
en infinitud de belleza.
placer leer.
saludos poeta
siempre agradecido, Alicia
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