Se resignaron a la mar.
Bracearon largamente,
sostenidos, únicamente,
por su ampliada esperanza
de no naufragar. Ya en tierra,
algo peor les esperaba. Licencias
y contratos, fronteras que no
entienden de hambre o de amor.
Ni de cosechas desperdiciadas,
ni de caciques o dictadores.
Fueron deportados, masacrados,
enviados a un destino de origen,
que no quisieron para ellos ni para sus
hijos. Náufragos, como casi todos,
seguimos viviendo, más allá
de toda lógica o sensatez.
©
- Autor: Ben-. ( Offline)
- Publicado: 19 de mayo de 2021 a las 10:33
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 48
- Usuarios favoritos de este poema: Jorge Horacio Richino, Vogelfrei, alicia perez hernandez, Augusto Fleid, Anton C. Faya
Comentarios1
No hay que perder la esperanza que algún día viviremos en un mundo mejor.
saludos poeta y amigo Ben
Que así sea, un abrazo y gracias por tu lindo mensaje, Alicia!!
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.