Hombre, ser y devenir

Creo en tu destino,
hijo de la tierra,
hombre del mar,
habitante de las nubes.

Creo en tu destino,
Hombre lobo,
hombre entre lobos,
niño que juega con cachorros.

Creo profundamente en ti.
En lo que quieres ser,
en lo que eres y en lo que harás.
En lo que quieres expresar.

Creo en lo que sientes,
y en la hoguera, la fogata.
Creo en el infierno que llevas,
muy adentro tuyo.

Me encanta cuando te desatas,
porque atado eres triste y lastimero.
Cuando aun estando preso,
se te ve la dignidad en la mirada.

Creo en tu pasión, en tu fuerza, tu voluntad.
aunque a veces no tengas fuerza,
la pasión no se vea en ninguna parte,
vayas por inercia y sin voluntad.

Creo en tu cabeza bien voluminosa.
Porque además de llevar pelo,
llevas ideas, sueños, fantasías.
Mundos por crear, diferentes realidades.

Creo en tu corazón, lleno de sangre caliente.
Porque late fuerte, y se desboca.
Porque es como un susurro cuando hay paz,
Porque en ocasiones se quiere salir.

Creo en lo que dices.
Porque siempre has sido afín a la verdad.
Porque detestas los engaños y las trampas.
Porque, aunque sea difícil y pierdas el camino,
eres fiel a ti mismo y tu palabra.

 Tengo fé en ti, al igual que tanta gente.
Porque entendiste que no te presionan, te acompañan.
Porque eres consciente de la desolación que es la vida,
y aún así, vives para encontrarte los oasis, cada momento feliz.

Porque te conozco, y todas tus luchas.
Porque te he visto perder y levantarte.
Porque veo la esperanza, y la fuerza en tu cara.
Porque soy tu, y quiero vivir, ser, amar, expresar,
dejarle algo bueno al mundo.

Porque en tu fragilidad, tus cicatrices y grandes luchas, has aprendido a amarte, a cuidarte, a estar bien contigo. Por esto y todo lo demás, creo en ti, en tu destino, en quien eres y en lo que serás. En tus sueños, en tus acciones, en tu obra. En lo que piensas, en lo que dices y lo que callas.

Por todo ello creo en ti, te amo y sé que estarás bien.