Descifrado azafrán
Almizcle al clavo
Y mezcle el anís con la miel
Quién temperó la ciudad de canela
Y la costa con corteza...
Hizo bramar al viento con alientos futuros exequias del bosque,
Pino y maravillas.
Ir a socorrer no quiso entre las telas de los ajos tiernos, dulces sacrificios,
Y al rumor de la quema, una manzana se hizo...se azó en enanchar...
Claro que fuimos nosotros...
Con la sed que da la mar en la tarde,
Y el hambre...
Y tu...tantos aromas entre las palmeras...
Tantas algas y huiro...
Tanto pelillo y pelícanos enredándose en la imaginaria hebra...
Que se consume...
Que se consume...
Con primavera en los dientes...hechizo del jenjibre...espero la Castaña...entre el café de trigo...mezcla perfecta de estas condiciones...
Del verde espanto...marrón seguro...
Que suena entre los pies...
Que moja entre las piedras...
Que pasa entre los rieles...
Y yo tan despierto, agüitando la macha humeante, Feliz de la vida.
- Autor: No (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 25 de mayo de 2021 a las 03:11
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 18
- Usuarios favoritos de este poema: Paco Jose Gonzalez, Anton C. Faya
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